2.7.13

¿Es Lucia Etxebarria retrasada?

Hoy he entrado a twitter y he visto un hashtag que me ha hecho muy feliz, por mi reciente nueva adicción: la lectura. El hashtag en cuestión era #RecomiendaUnLibro. He recomendado un par o tres de los últimos que me he leído y he leído muchos tweets aspirando títulos por mis fosas nasales.

Mientras esto ocurría he visto como @LaEtxebarria RT unos pocos donde se vanagloriaban sus creaciones, me ha resultado extraño, ¿ Lucia Etxebarria no lee otros libros? Le he dejado un tweet con este pensamiento, no ha habido contestación, obviamente.

En su twitter ella no recomendaba libros, ella estaba en pleno ataque de rabia contra el gobierno y su 21% en cultura, incluidos festivales de música.

Por curiosidad me he informado de lo que cuestan sus libros (recordamos que el 21% es en base al total del precio de venta), su último libro: “Liquidación por derribo” cuesta tanto en Fnac como en Amazon, en tapa blanda, 15€. De ese total el gobierno se lleva la no despreciable cifra de 3,15€. ¿Cuesta editar un libro 12€? La verdad, no lo se.

Pero entonces, he mirado cuanto cuesta la versión digital de ese mismo libro, 10€. Sin el 21% de IVA, se queda en... 8€.

Creo que del mundo digital y la “autoedición” entendemos todos, no?.

La autoedición total del autor no provoca excesivos gastos: horas dedicadas y electricidad del portátil.

Entendamos que los escritores no saben de diseño gráfico, y que necesitan un buen diseñador. ¿La suma de ambas cosas nos hace pagar a los consumidores 8€ por un archivo digital? No creo.

Un libro autoeditado y vendido a través de Amazon, empresa que facilita la venta de estos, no supera casi nunca los 5€, IVA de Linchestein o España incluidos. (Linchestein es donde se supone que está alojado legalmente Amazon, o eso me ha dicho @LaEtxebarria.)

Sí, con el tema del dinero sí que ha reaccionado.

En reacción a mis tweets y después de invitarme a “montar tu propia editorial si es que eres tan listo” me ha linkeado esta entrevista a un editor español en quiebra.


Estaba fregando cuando me lo ha linqueado. sí, soy adicto a twitter y dejo de fregar si me mencionan, apalearme. Me he dejado el articulo para después de fregar, para leerlo sin prisas. Y mientras rascaba la grasa de la plancha de la carne pensaba que @LaEtxebarria me iba a hacer un “Zas! En toda la boca!” y me iba a tener que retractar de mis palabras de indocumentado. Pero...

No.

De esta entrevista a el Sr. Millán he sacado tres notas en mis post-its virtuales:

  1. “La cuestión de la autoedición tiene dos caras: desde el punto de vista de los autores, carga sobre ellos una serie de funciones (edición, corrección, maquetación, incluso cubierta) que probablemente no estén preparados para hacer.”

Yo respondo:

En la edición están incluidos la maquetación y la cubierta. Así que Sr.Millán no separes conceptos para que parezca que los autores os necesitan en la edición digital, porque probablemente hayan millones de diseñadores gráficos y lingüistas freelance esperando un trabajo sin necesidad de mediadores.

     2.     el entrevistador dice: “El porcentaje que se llevan los autores es hasta un 70 por cien, frente   al 10 por cien en la edición tradicional.”

Yo respondo: 

Emmmm, contra esto no tengo nada más que añadir. Ah! Sí! Que usted transcriba este porcentaje con un 70 por 100 frente al 10 por 100, en vez de usar el conocidí­simo 70% o 10% me hace dudar sobre usted, y sus intenciones.

  1. en otro momento el Sr. Millán dice: “A ello podemos añadir lo que llamaría “efecto lotería”, que se da en edición como en pocos negocios. Uno puede ser editor de un libro sobre las andanzas de un niño mago, o de cincuenta variantes de un porno soft, y de repente ver cómo se convierten en una mina de oro… Eso no ocurre en otros negocios.” 
     
Yo respondo:

¿De verdad cree que eso no ocurre en otros negocios?.

Mi pregunta hacía usted sería: ¿Hay en algún negocio en el que eso no ocurra? ¿Un bar? ¿Industria del calzado? ¿tienda? ¿música? ¿cine? ¿diseño industrial? ¿pesca?....


Pero,

claro,

no puedo negar que el 21% de IVA encarece el producto final. Y que este encarecimiento no nos facilita a los compradores consumir la cultura legalmente. Es obvio que hay que luchar por que el IVA este a niveles razonables, a un 8% no estaría nada mal.

Pero ¿está en manos de los consumidores esta bajada?, ¿servirá de algo otra manifestación camuflada en las decenas de ellas que se dan diariamente en “nuestro” país?

El sector de la edición es el 1% del PIB de nuestro país, esto convierte a este sector en un sector con algo de fuerza, más de la que parece. ¿Qué pasaría si el gobierno dejará de recibir este dinero? ¿Qué pasaría si españa solo ingresara 0,21€ de cada libro? Frente a los 3,15€ que roban hoy en día. ¿Qué pasaría si un libro costara solo 1€?

y una última pregunta:

¿Está en manos del consumidor la bajada del IVA?

Yo, creo, que solo tenemos derecho a un meñique.

1 comentario:

Becca dijo...

Creo que tienes más razón que un santo, y que, aunque no menciones a los salmones (cosa que considero un error) es una argumentación muy difícil de rebatir. Después de leer el twitter de esta mujer, creo que solo es una pobre excusa para no decir llanamente que quiere aprovecharse de aquello pocos a los que la cultura nos sigue pareciendo una necesidad. A veces es tan fácil echarle la culpa a otros de nuestras propias ansias.

Eres genial ^^